Como parte de un artículo sobre la carrera de Sean O’Haire, Dave Meltzer relató un inusual incidente entre el recién fenecido luchador y el boxeador Butterbean, quienes se vieron las caras en una pelea MMA.
En el año 2006, Butterbean vs Mark Hunt estaba programada para el evento Pride 23 pero Hunt tuvo problemas de visa y O’Haire tomó el puesto a última hora para retar a Butterbean.
Antes de la pelea Nobuyuki Sakakibara, el presidente de Pride, le dijo a O’Haire que los fans esperaban una guerra de pie entre Butterbean vs Hunt, y esperaban de O’Haire lo mismo. El grupo de O’Haire se opuso a la sugerencia ya que el plan de ataque iba a ser todo lo contrario ya que iban a mantener a Butterbean en el piso.
Rick Bassman, quien representaba a O’Haire, negoció un bono de hasta $10,000, cual se añadía a los $40,000 que estaban recibiendo por la pelea. “Voy a ser asesinado, ¿verdad?” le dijo O’Haire a Bassman. “¿Podrías preguntarle Bean no romper mi cara?”
Bassman, amigo de Butterbean, luego le pidió al boxeador que tratara a O’Haire con cuidado y este aceptó pero le dijo que él odia ser pateado en la cara y va a perder la calma si eso sucede. O’Haire luego se fue a celebrar su fortuna ese día en las Vegas.
La pelea comenzó y lo primero que hizo O’Haire fue patear a Butterbean en la cara. 29 segundos más tarde, O’Haire fue noqueado.
Pietaje del combate: